El Sporting B pasa por momentos difíciles. Tras un buen mes de febrero, en marzo ha vuelto a las andadas y ocupa posición de descenso a tercera división, categoría que los que dicen saber de esto, no es buena para la formación de jugadores para el primer equipo. Sin embargo, el mayor reproche a su entrenador, Javier Vidales, es el deplorable juego que realiza el equipo, más cercano el pata pum parriba que a un fútbol de toque más apropiado para la calidad que se les supone a los jugadores que en un futuro próximo deberían formar parte de la primera plantilla.Pero ¿es todo culpa del técnico astorgano?
La temporada pasada el Pitu Abelardo comenzó la temporada como técnico del filial. Antes de finalizar la primera vuelta, la mayoría de seguidores que escriben en los foros del club, pedían su cabeza por los malos resultados del equipo. La mayoría habían visto al equipo sólo una vez, en la que los jóvenes jugadores se exhibieron ante el Real Oviedo. Entonces llegó Javier Vidales, que con una gran segunda vuelta salvó la categoría. ¿Había entonces algún insatisfecho con el juego del equipo?
Es difícil combinar formación con resultados. El sistema actual, en mi opinión tiene las siguientes carencias:
- La aspiración de la mayoría de filiales es no descender a tercera. No olvidemos que incluso el Barcelona B lo sufrión no hace mucho. El miedo a consumar el descenso, obliga a tomar decisiones resultadistas, bien sea buscando un juego más amarrategui o bien rellenando el equipo con jugadores más veteranos, que van a tapar el paso a los jóvenes más talentosos.
- No es atractivo para el espectador. Creo que a los habituales de Mareo, Lezama, Zubieta, Tajonar etc les resulta más atractivo enfrentarse a otro filial que a un Lemona o La Muela, con todos los respetos para estos equipos.
- Perjudican a otras ciudades que buscan su sitio en el fútbol profesional. Para muchos equipos representativos de ciudades, el fútbol profesional es vital para su supervivencia. Equipos como el Barcelona B o el Villarreal B, quitarán la plaza de segunda a otros como Tenerife o Salamanca, para los que el descenso será un verdadero drama. Además, eliminar a los filiales, podría ser un buen paso para la reestructuración de ese pozo en el que se ha convertido la segunda B.
Hace un par de años, hubo una propuesta que partió de los responsables de fútbol base del Osasuna, de crear una liga de filiales sub 21. Me gusta su fondo, si bien no me convencían algunas concesiones como las de permitir un determinado número de jugadores sub 23 y jugadores del primer equipo que salen de lesiones. Creo que esas medidas desvirtuarían la competición.
Desconozco las causas por las que el proyecto no salió adelante. Sospecho se temía por las consecuencias del fracaso de dicha liga, ya que los filiales habrían perdido sus plazas en las categorías y tendrían que volver a empezar desde abajo. No obstante creo que se debe seguir luchando por llevar esta idea adelante.
Otra solución podría ser subir el nivel de la División de Honor Juvenil. Para ello habría que reducir drásticamente el número de equipos que la forman. Parece, por la encuesta, que dicha medida no gusta a los lectores de este blog.
Planteo una nueva encuesta en la podéis votar por mantener el sistema actual, crear una liga de filiales, o reducir los equipos de la División de Honor. Espero también vuestras opiniones y propuestas en forma de comentarios.
Yo también prefiero una liga de filiales. Sería lo más parecido a las ligas de deporte universitario americanas.
ResponderEliminarA mi la 2ªB no me gusta, pero menos me gustaría una liga de filiales, como sportinguista. Al igual que lo de DHJ juvenil, me gusta como está.
ResponderEliminarTodo lo que sea no centralizar las competiciones viene bien a los clubes modestos, sino los cracks ya se habrían ido porque probablemente el sporting estaria subiendo y bajando de categoría.
A parte con la 2ªB existe unas libertades que no habría con la liga de filiales. Poder contar con jugadores mayores, subir y bajar del primer equipo sin problemas...
Y es que a mi modo de ver, el sporting no puede pretender que los once titulares vayan a ser jugadores de Primera División en uno o dos años. Bastante es que se confie en cuatro o cinco jugadores, y estos no pueden crecer con cuatro o cinco más jovenes y malviviendo para mantener la categoría. El central de futuro debería tener al lado a uno veterano que le entienda como le harán en primera, y así con otro medio y algun puesto aleatorio.
Pues yo soy partidario de una liga de filiales. Creo que se jugaría mucho más al futbol, habria mas transiciones en el juego y no lo que estamos viendo este año en la 2ºB, horrible, equipos que juegan a lanzar balones a los puntas para que se peleen y en la mayoria de las ocasiones te ganan porque tienen tios ya curtidos en la categoria o que vienen de vuelta. Tal como está montado no es bueno para la progresion de una cantera. Sin ir más lejos Nacho Cases al principio de temporada era uno mas del equipo, con calidad claro está, pegó el salto y ahora es uno de los que pone criterio en el centro del campo de Preciado.
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