viernes, 31 de diciembre de 2010

Salvemos nuestras canteras

Soy seguidor del Sporting de Gijón, y eso, aunque me consta que muchos no lo comparten, implica ser amante de su cantera. La afición está enfadada y desilusionada por la falta de refuerzos, el poco dinero que se destina a los fichajes. A los que amamos las canteras, los que seguimos a los yogurinos desde que dan sus primeras patadas, siempre nos quedará la ilusión de que sean ellos los que nos den las tardes de gloria. Por ello me sienta con una puñalada, que las nuevas joyas de la cantera, Juan Mera y Alex Serrano, puedan abandonar Gijón por las ofertas que les llegan de los más poderosos equipos europeos.



No me acuerdo de la primera vez que vi al filial de mi equipo, por entonces Sporting Atlético, que por aquella jugaba ciertas tardes en el Molinón al acabar el primer equipo. Sé que tuve la suerte de ver a Luis Enrique, las diabluras de Juanele, probablemente Manjarín y al pitu Abelardo, jugando contra Langreo, Avilés Industrial etc. Aunque apuntaban buenas maneras, pocos podrían imaginar que todos ellos acabarían en la selección nacional.


Ya por entonces, uno se fijaba en aquellos que convocaban para las selecciones nacionales inferiores. Uno de ellos era Dani Díaz. Sólo le recuerdo un partido con el primer equipo contra el Barcelona, y seguramente Pep Guardiola se acordará de él. Acabaría probando suerte por el fútbol portugués.

Más tarde llegaron llegaron otras buenas generaciones, Iván Iglesias, Marcelino,José Manuel, CastañoMario Cotelo, David Cano etc. Ninguno alcanzó el nivel de los anteriores, pero nos ilusionaron durante alguna temporada rozando el ascenso a Segunda División.

Seguí durante años a los jugadores de mi quinta. Rodo y Miguelín, desde alevines, eran los delanteros de aquella generación. El primero perdió la vida trágicamente en un accidente de moto. El segundo ganó ligas, la UEFA, jugó finales de Champions y alcanzó la internacionalidad. Todo ello sin haber jugado ni un minuto con la camiseta del primer equipo sportinguista. Se fue al Valencia, poco después de jugar mi último partido contra él en el Torneo juvenil de Barrios de Gijón. Allí siguió creciendo  y Miguelín se convirtió en Miguel Ángel Angulo. Más tarde acabó en el Sporting, pero en el de Portugal.



Sí pudimos disfrutar de alguno de sus compañeros: los Sergios (Sánchez y Fernández), Otero, Isma y Cobas. A 28 km, podían gozar con otros fenómenos de aquella quinta: Iván Ania, Cesar Martín y Jaime.


  Por aquellos años arrancaba el Torneo alevín de Brunete. El Sporting ganó una de las primeras ediciones. Ninguno de esos chavales llegó al primer equipo. Pocos años después caíamos ante el Oviedo. El mejor jugador del torneo era el azul Omar.  En juveniles se vino al equipo gijonés y alcanzó el primer equipo, pero nunca cumplió con las expectativas. Ahora juega en segunda B con el Pontevedra.

Después vinieron malos tiempos para ambos equipos. Muchos jugadores, pero ninguno cuajaba, hasta que llegó David Villa. Un par de años en el primer equipo sportinguista, casi cuarenta goles y se fue rumbo a Zaragoza. El Sporting ingresó 3 M que al menos y evitó la desaparición. Con los maños ganó la Copa del Rey y dejó en sus arcas casi 20 M tras irse al Valencia. 


Llegaron más campeonatos nacionales en categorías inferiores, primero en Cadetes y luego en Juveniles. Muchos de aquellos llegaron al primer equipo: el ya mencionado Omar, De Lucas, Landeira, Noel Alonso, Luis Morán, Míchel... Éste último fue el único que se consolidó en el primer equipo, y cuando lo hizo se le traspasó hace un año al Birmingham por poco más de 3 M. Aún se le busca sustituto. Otros buscaron suerte fuera, como son los casos del portero Manu y el extremo Saul, actualmente en el Deportivo de la Coruña.



En el Colegio Inmaculada disfrutaban del alevín Hugo López. Éste ni siquiera pasó por Mareo, sino que se fue directamente a la Masía. Allí compartió vestuario con muchos de los que están ahora en el primer equipo. Él no tuvo tanta suerte. Regresó a Gijón, cedido por el Almería, para jugar una temporada en el Sporting B. Ahora juega en la tercera división cántabra.

Hace unos meses tuve la suerte de ver al Sporting benjamín coronarse campeón de España, en un partidazo contra los extremeños del Flecha Negra. También me alegré cuando años atrás lo consiguieron los gijoneses del Xeitosa y los oventenses del Juventud Estadio. En este equipo jugaba Marcos Norniella, que años después ficharía por el Sporting y que estaba destinado a ser una de las joyas de la cantera. Lo último que supe de él es que tendría que dejar el fútbol por una lesión. 

También tuve la suerte de ver en cadetes a Sergio Alvarez, Juan Muñiz y Guillermo Méndez. Los tres ya debutaron con el primer equipo.  Por el primero de ellos ya se interesó el Real Madrid, afortunadamente decidió seguir aquí.



Ahora que se pueden ir Juan Mera y Alex Serrano, sin que el Sporting pueda hacer nada, uno se llega a plantear si de verdad merece al pena este esfuerzo que hacen en las Escuelas de Fútbol de los equipos modestos para que al final nos los roben los grandes. Por un lado está el coste de su formación. Pero sobre todo, lo que nos roban es la ilusión a los que amamos el fútbol base.  



Y eso es para mí la cantera. Mucho trabajo, desgracias, jugadores que se quedan por el camino,  unos pocos que triunfan, pero sobre todo un montón de ilusiones. Por todo ello, le pido al año nuevo que nos dejen disfrutar de nuestros guajes.

5 comentarios:

  1. Marcelino fue todo un idolo en Mallorca. Llegó en 2ª y acabó en la Seleccion.

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  2. Excelente articulo. Viva la cantera. Feliz 2011. Saludos.

    PD. Hay un concurso del mejor blog del 2011 en el que estas nominado. Pasa a votar (un blog que no sea el tuyo). Saludos de nuevo.

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  3. Muy buen articulo, tranquilo porque Mera tiene contrato y si marcha es porque el Sporting negocie. En el caso de Alex Serrano aunque no tenga un contrato que le ate no se va a ir porque se esta respetando en todo momento la opinion del padre en el crecimiento de su hijo como jugador profesional, si fuera por el club ya habria hecho la pretemporada con el B y Mino se nego.

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  4. Hay que estar tranquilos Mera es sportinguista hasta la medula y no se irá.

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  5. Excelente artículo.
    Pero es ley del fútbol que unos abandonen. Lo mismo se puede aplicar a la cantidad de clubes básicos asturianos que pierden sus jugadores en favor del Sporting. El Sporting no es más ni menos que lo demás. Lo que hay que hacer es abogar porque los guajes lleguen y si es necesario que salgan que al menos dejen algo en las arcas como ha sido el caso de Villa o Michel por ejemplo.

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